Tarta de galletas maría



Es posible que la galleta María sea una de las más famosas del mundo, popularizada desde que fue inventada en Inglaterra en el siglo XIX. A mí me gusta su papel a la hora de preparar postres tradicionales, de esos tan caseros que nos devuelven un poco a la infancia. Esta tarta de galletas María es muy típica en Portugal y una deliciosa variante a nuestra tarta típica de los cumples.

Una variante también conocida en el país vecino utiliza café para mojar las galletas, pero yo prefiero leche aromatizada con vainilla, más apta para todos los paladares. Puesto que las galletas María son redondas, el aspecto final de este pastel es de una flor que queda muy vistosa a la hora de servir. Hay que procurar dejarla enfriar unas horas en la nevera para que la crema se endurezca y tenga mucho mejor sabor.

Ingredientes
Para 1 unidades
Galletas tipo María paquetes2
Mantequilla sin sal a temperatura ambiente200 g
Azúcar glasé180 g
Yemas de huevo a temperatura ambiente2
Leche a temperatura ambiente250 ml
Esencia de vainilla3 ml

Cómo hacer tarta de galletas María
Dificultad: Media
Tiempo total1 h 40 m
Elaboración40 m
Reposo1 h


Calentar la leche a fuego suave con media vaina de vainilla abierta. Dejar infusionar, colar y dejar enfriar. O simplemente mezclar bien la leche fría con el azúcar vainillado. Disponer la mantequilla troceada, a temperatura ambiente, en un recipiente mediano. Batir con una batidora de varillas hasta dejar una textura cremosa y suave.

Añadir poco a poco el azúcar glasé, sin dejar de batir, removiendo de vez en cuando con una lengüeta para conseguir una textura uniforme. Agregar las dos yemas de huevo y la esencia de vainilla, y batir un poco más a velocidad baja hasta tener una consistencia cremosa, homogénea y sin grumos.

Mojar una galleta María en la leche enfriada, escurrir y disponer en el centro de una fuente, bandeja o donde vayamos a servir la tarta. Repetir con 6 galletas más para distribuirlas a su alrededor, formando una base de flor de galletas. No tienen que estar muy empapadas. Untar ligeramente cada galleta con la crema, repartiéndola uniformemente.

Repetir la operación hasta tener unos 5 pisos de galletas y crema. Terminar cubriendo de forma homogénea toda la superficie y los laterales, intentando dejarla lisa con ayuda de una espátula de repostería. Triturar unas cuantas galletas María y repartir por la parte superior. Dejar enfriar en la nevera como mínimo 1 hora, mejor dos o tres.

Degustación

La tarta de galletas María es toda una tentación que gustará a grandes y pequeños, en porciones controladas porque creo que es bastante contundente. Se pueden variar los sabores cambiando los aromas de la crema y de la leche, o usando café como ya he comentado. Es muy fácil de preparar y podemos pedir a los niños que nos ayuden a montarla.