Ingredientes
2 pechugas de pollo (entre 150 y 200 g cada una)
2 cucharadas de salsa de soja
1 huevo
1 diente de ajo
1 trozo de jengibre (como del tamaño de un diente de ajo)
Maicena para rebozar
Aceite de girasol para freírPara la salsa:
2 limones
200 ml de caldo de pollo
1 cucharada de maicena
1 cucharadita de vinagre de arroz (opcional)
1 cucharadita de azúcar (opcional)
Sal y pimienta negra molida
Elaboración
Limpiar las pechugas de pollo retirando el exceso de grasa. Si son muy gordas, lo mejor es cortarlas por la mitad a lo largo. Las podemos aplastar un poco con un martillo para carne o pincharlas por ambos lados con un tenedor.
Sazonar con pimienta y reservar.
Rallar el jengibre (con un rallador de jengibre), picarlo muy fino o machacarlo con un mortero para hacer una pasta.
Pelar el diente de ajo, quitarle el germen si se desea, y también rallarlo, picarlo fino o machacarlo.
En un bol, mezclar la salsa de soja, el jengibre rallado, el ajo rallado y el huevo. Mezclar bien.
Poner a marinar las pechugas de pollo, al menos 30 minutos, aunque mejor si pueden ser de 2 a 3 horas.
Poner a calentar el aceite para freír en una sartén o en la freidora a 160 ºC.
Rebozar las pechugas de pollo en maicena.
Freír en el aceite caliente hasta que estén bien doradas. Reservar sobre una rejilla o papel de cocina para que pierdan el exceso de aceite.
Rallar la cáscara de uno de los limones (que previamente se ha lavado).
Exprimir los dos limones.
En un cazo, poner el zumo de limón, el caldo de pollo, la cucharadita de vinagre de arroz, de azúcar y la cucharada de maicena. Mezclar bien hasta que esta última se haya disuelto.
Calentar a fuego medio-alto y remover hasta que la salsa haya espesado y se haya vuelto un poco más transparente.
Probar y ajustar de sal.
Retirar del fuego y agregar la ralladura de limón.
Cortar el pollo en tiras.
Para servir, se puede colocar el pollo en los platos de servir y mojar bien con la salsa de limón o añadir las tiras de pollo al cazo con la salsa y mezclar bien.
Y ya está. Saca tus palillos chinos y a comer. ¡Buen provecho!
Sugerencias, trucos y consejos
Puedes decorar el plato con unas rodajas de limón o con uno poco de sésamo y cebolleta china cortada en rodajas muy finas.
También se puede cortar la pechuga en tiras finas antes de ponerla a macerar.
Esta receta también queda muy rica utilizando contramuslo deshuesado, cortado en trozos del tamaño de un bocado, en lugar de la pechuga de pollo.
En el blog encontrarás muchas recetas asiáticas. Prueba los rollitos de salmón y aguacate, el pollo con almendras o la ensalada wakame.