
Ingredientes
3 huevos M
200 g de leche condensada
100 ml de anís o 100 ml de leche entera y unas gotas de esencia de anís.
4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
500 g de harina común tamizada con 5 g de sal
1 sobre de levadura de repostería (12 g) (polvo de hornear)
Azúcar común para rebozar
3 huevos M
200 g de leche condensada
100 ml de anís o 100 ml de leche entera y unas gotas de esencia de anís.
4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
500 g de harina común tamizada con 5 g de sal
1 sobre de levadura de repostería (12 g) (polvo de hornear)
Azúcar común para rebozar
Para el almíbar (a utilizar sólo en las rosquillas horneadas)
100 g de agua
100 g de anís
70 g de azúcar
Para la fritura
Aceite suficiente de oliva o de girasol
Instrucciones
Vierte la leche condensada en el vaso de tu robot de cocina.
Añade los huevos, el aceite y mezcla hasta obtener una crema homogénea.
Incorpora el anis, continúa mezclando.
Si lo haces con amasadora, pon el gancho de amasar y agrega poco a poco (en dos veces) la harina tamizada con la levadura, amasa hasta que tener una masa bien integrada.
Vuelca la masa en la superficie de trabajo y forma una bola.
Deja reposar cubierta de un paño durante media hora.
Corta la masa en pequeños trozos y forma cordones y únelos formando las rosquillas.
Fríe en abundante aceite, no más de 2 o 3 rosquillas por vez para evitar que el aceite pierda temperatura.
100 g de agua
100 g de anís
70 g de azúcar
Para la fritura
Aceite suficiente de oliva o de girasol
Instrucciones
Vierte la leche condensada en el vaso de tu robot de cocina.
Añade los huevos, el aceite y mezcla hasta obtener una crema homogénea.
Incorpora el anis, continúa mezclando.
Si lo haces con amasadora, pon el gancho de amasar y agrega poco a poco (en dos veces) la harina tamizada con la levadura, amasa hasta que tener una masa bien integrada.
Vuelca la masa en la superficie de trabajo y forma una bola.
Deja reposar cubierta de un paño durante media hora.
Corta la masa en pequeños trozos y forma cordones y únelos formando las rosquillas.
Fríe en abundante aceite, no más de 2 o 3 rosquillas por vez para evitar que el aceite pierda temperatura.
Es mejor utilizar un cazo con 3 o 4 dedos de aceite para que las rosquillas naden en el aceite, deberás estar atent@ y darlas vuelta pronto para evitar que se quemen y queden crudas por dentro. Las primeras te servirán para saber si la temperatura del aceite es el correcto. La temperatura aconsejada para el aceite es de 170º, puedes medirla con un termómetro de cocina.
Retira del fuego, pasa a un papel absorbente y reboza en azúcar en grano.
Retira del fuego, pasa a un papel absorbente y reboza en azúcar en grano.
Al horno
En primer lugar pon todos los ingredientes del almíbar al fuego y deja hervir entre 7 y 8 minutos o hasta que espese ligeramente. Deja enfriar y reserva.
Enciende el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Engrasa una fuente de hornear.
Forma las rosquillas y colócalas en la fuente de hornear.
Hornea entre 10 y 12 minutos. Este horneado no dora las rosquillas así que para tengan un poquito de color, encendemos el grill del horno y las dejamos unos minutos hasta que las veamos ligeramente doradas.
Retiramos las rosquillas para una rejilla para enfríen.
Como no tienen aceite, el azúcar no se pega, así que las pintamos con el almíbar que tenemos preparado y a continuación las pasamos por azúcar.
En primer lugar pon todos los ingredientes del almíbar al fuego y deja hervir entre 7 y 8 minutos o hasta que espese ligeramente. Deja enfriar y reserva.
Enciende el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Engrasa una fuente de hornear.
Forma las rosquillas y colócalas en la fuente de hornear.
Hornea entre 10 y 12 minutos. Este horneado no dora las rosquillas así que para tengan un poquito de color, encendemos el grill del horno y las dejamos unos minutos hasta que las veamos ligeramente doradas.
Retiramos las rosquillas para una rejilla para enfríen.
Como no tienen aceite, el azúcar no se pega, así que las pintamos con el almíbar que tenemos preparado y a continuación las pasamos por azúcar.
Thermomix
Vierte en el vaso la leche condensada, los huevos, el aceite, el anís y programa 2 minutos a veloc. 3½.
Añade la mitad de la harina y programa 2 minutos a velocidad 4-5
Incorpora el resto de la harina, programa unos segundos a veloc. 5 para que la harina se integre con lo demás y programa 2 minutos a veloc. espiga.
Vuelca la masa en la superficie de trabajo y forma una bola.
Deja reposar cubierta de un paño durante media hora.
Corta la masa en pequeños trozos y forma cordones y únelos formando las rosquillas.
Fríe en abundante aceite, no más de 2 o 3 rosquillas por vez para evitar que el aceite pierda temperatura. Es mejor utilizar un cazo con 3 o 4 dedos de aceite para que las rosquillas naden en el aceite, deberás estar atent@ y darlas vuelta pronto para evitar que se quemen. y queden crudas por dentro. Las primeras te servirán para saber si la temperatura del aceite es el correcto. La temperatura aconsejada para el aceite es de 170º, puedes medirla con un termómetro de cocina.
Retira del fuego, pasa a un papel absorbente y reboza en azúcar en grano.
Al horno
En primer lugar pon todos los ingredientes del almíbar al fuego y deja hervir entre 7 y 8 minutos o hasta que espese ligeramente. Deja enfriar y reserva.
Enciende el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Engrasa una fuente de hornear.
Forma las rosquillas y colócalas en la fuente de hornear.
Hornea entre 10 y 12 minutos. Este horneado no dora las rosquillas así que para tengan un poquito de color, encendemos el grill del horno y las dejamos unos minutos hasta que las veamos ligeramente doradas.
Retiramos las rosquillas para una rejilla para enfríen.
Como no tienen aceite, el azúcar no se pega, así que las pintamos con el almíbar que tenemos preparado y a continuación las pasamos por azúcar.
Frabiconsejos
- Os aconsejo formar todas las rosquillas antes de poneros a freír, así podréis atender la fritura y no habrá peligro de que se os quemen.
- Yo las frío en un cazo de esos de calentar leche, con aceite hasta la mitad para que las rosquillas bailen en el aceite y se hagan por todas partes, al tiempo las voy girando.
- Es importante encontrar el punto de calor justo del aceite, no debe de estar demasiado caliente o las quemará por fuera y quedarán crudas por dentro.
- No os desaniméis, las primeras son de prueba y casi nunca salen bien porque el aceite está demasiado caliente.
Se mantienen perfectamente durante 3 o 4 días en un bote hermético o en una bolsa de congelación que cierre bien (con cierre de cremallera)
¿No te gusta el anís? puedes aromatizar con ralladura de naranja o limón, o ambas.
¿No vives en España y en tu país las harinas tienen otro nombre? Entonces deberás mirar AQUÍ cual es el equivalente en tu país.

Las rosquillas que véis a la derecha de la tabla son las horneadas y las de la izquierda son las fritas.
La masa de estas rosquillas es muy esponjosa algo poco habitual en este tipo de bollos.
Vierte en el vaso la leche condensada, los huevos, el aceite, el anís y programa 2 minutos a veloc. 3½.
Añade la mitad de la harina y programa 2 minutos a velocidad 4-5
Incorpora el resto de la harina, programa unos segundos a veloc. 5 para que la harina se integre con lo demás y programa 2 minutos a veloc. espiga.
Vuelca la masa en la superficie de trabajo y forma una bola.
Deja reposar cubierta de un paño durante media hora.
Corta la masa en pequeños trozos y forma cordones y únelos formando las rosquillas.
Fríe en abundante aceite, no más de 2 o 3 rosquillas por vez para evitar que el aceite pierda temperatura. Es mejor utilizar un cazo con 3 o 4 dedos de aceite para que las rosquillas naden en el aceite, deberás estar atent@ y darlas vuelta pronto para evitar que se quemen. y queden crudas por dentro. Las primeras te servirán para saber si la temperatura del aceite es el correcto. La temperatura aconsejada para el aceite es de 170º, puedes medirla con un termómetro de cocina.
Retira del fuego, pasa a un papel absorbente y reboza en azúcar en grano.
Al horno
En primer lugar pon todos los ingredientes del almíbar al fuego y deja hervir entre 7 y 8 minutos o hasta que espese ligeramente. Deja enfriar y reserva.
Enciende el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Engrasa una fuente de hornear.
Forma las rosquillas y colócalas en la fuente de hornear.
Hornea entre 10 y 12 minutos. Este horneado no dora las rosquillas así que para tengan un poquito de color, encendemos el grill del horno y las dejamos unos minutos hasta que las veamos ligeramente doradas.
Retiramos las rosquillas para una rejilla para enfríen.
Como no tienen aceite, el azúcar no se pega, así que las pintamos con el almíbar que tenemos preparado y a continuación las pasamos por azúcar.
Frabiconsejos
- Os aconsejo formar todas las rosquillas antes de poneros a freír, así podréis atender la fritura y no habrá peligro de que se os quemen.
- Yo las frío en un cazo de esos de calentar leche, con aceite hasta la mitad para que las rosquillas bailen en el aceite y se hagan por todas partes, al tiempo las voy girando.
- Es importante encontrar el punto de calor justo del aceite, no debe de estar demasiado caliente o las quemará por fuera y quedarán crudas por dentro.
- No os desaniméis, las primeras son de prueba y casi nunca salen bien porque el aceite está demasiado caliente.
Se mantienen perfectamente durante 3 o 4 días en un bote hermético o en una bolsa de congelación que cierre bien (con cierre de cremallera)
¿No te gusta el anís? puedes aromatizar con ralladura de naranja o limón, o ambas.
¿No vives en España y en tu país las harinas tienen otro nombre? Entonces deberás mirar AQUÍ cual es el equivalente en tu país.

Las rosquillas que véis a la derecha de la tabla son las horneadas y las de la izquierda son las fritas.
La masa de estas rosquillas es muy esponjosa algo poco habitual en este tipo de bollos.