Roscos de mamá



Ingredientes:
3 huevos
un vaso de azúcar
medio vaso de zumo de naranja
medio vaso de aceite de girasol
un tercio de leche del mismo tamaño de vaso utilizado
1 kilo de harina
un sobre de levadura
un limón
canela y azúcar para terminar


Elaboración:
Lo primero que vamos a realizar será batir los huevos con la ayuda de las varillas de la batidora (opcional, me resulta mas cómodo).


Una vez tenemos los huevos batidos, vertemos el aceite templado.



Seguidamente la levadura y batimos con las varillas muy bien hasta que no queden grumos.


Echamos la cascara del limón rallada.



Vertemos la leche, el zumo y el azúcar ( uso el mismo tamaño de vaso para las medidas de todos los ingredientes). 



Mezclamos muy bien. Echamos la harina poco a poco tamizada.



La medida de harina es de un kilo aproximadamente para estas medidas. Siempre compro un poco mas del kilo, porque la masa, su terminación te tienes que guiar mas por el tacto y la vista. Una vez que veías que podéis trabajar con ella y que no se pegue en las manos, estará lista.

Tiene que estar blanda pero cómoda para trabajar. Mi truco para saber si esta terminada es con el puño de la mano, doy en la masa y si no se pega a los nudillos pues ya la tenemos lista.

Dejamos reposar un par de horas para que todos los ingredientes se unan.

Pasado el tiempo ponemos abundante aceite de girasol a calentar, ponemos la cascara de una de las naranjas para aromatizar el aceite.

Ponemos sobre la mesa donde nos pongamos a trabajar un poco de harina espolvoreada, vamos haciendo los roscos.



Una vez caliente el aceite, retiramos la cascara y procedemos a echar los roscos.



No hagáis muchos de golpe, es mejor poco a poco. Cuando tomen un color dorado lo retiramos y lo ponemos en un plato con papel absorbente.



 Luego en otro plato preparamos azúcar mezclada con canela en polvo.



Mojamos el rosco y listo.



Solo nos queda empezar a comérnoslos todos, que buenos que están.